Los jóvenes categoría 2001 formados en Deportivo Roca en la primera etapa y luego en Ever Ready, dialogaron sobre las expectativas de esta segunda temporada en las divisiones inferiores de esta institución que milita en la Primera C Metropolitana.

Estos dos amigos vienen compartiendo equipo desde que se iniciaron en el baby fútbol y lo siguen haciendo en Burzaco persiguiendo el objetivo de llegar a primera, este año perteneciendo a la quinta división. Jonathan y Luciano afrontan juntos esta aventura en todos los aspectos ya que desde que se incorporaron a San Martín viven con los abuelos de Iramain quienes contienen a los dos adolescentes que también compartieron sus vacaciones en la zona.

JONATHAN CHINGOLEO
A horas de su regreso para afrontar su segundo año allí donde ya transitan la pretemporada, «Yoni» nos contaba que «desde febrero de 2018 que estoy allá, el año pasado jugué en séptima y este año será en quinta. Cuando llegué empecé jugando en liga y después terminén en el equipo que juega en AFA».
«Estoy jugando de marcador de punta por derecha, siempre jugué en esa posición y también comocarrilero» y agregó que «el primer año me costó adaptarme y este año quizá un poco también porque las vacaciones se hicieron largas».
Chingoleo contó que «vivo en una casa familiar, la de los abuelos de Luciano, eso ayuda y mucho. En un pensión es distinto, tenemos más libertad nosotros, más la contención de la familia».
A la hora de hablar de objetivos para este 2019, Jonathan afirmó que «el objetivo es poder ser titular en quinta este año, y poder afianzarme para alcanzar el debut en la primera división. Hasta el momento he estado en un selectivo para jugar ante reserva».
Por último llegó el turno de los agradecimientos los cuales estuvieron destinados «para la familia y toda la gente del Centro de Alabanza de la iglesia».

LUCIANO IRAMAIN
El también lateral, que se desempeña por ambos bandos, Luciano Iramain, ya en la vuelta a los entrenamientos confió sobre la vuelta a Buenos Aires que «cuesta por dejar a la familia pero uno tiene en claro lo que quiere y eso te da fuerzas. Ya realizamos los primeros trabajos que fueron muy físicos, típicos de una pretemporada».
«Mi objetivo es poder llegar a primera, eso siempre y cuando pueda ser titular en la quinta de AFA, pero apuntando a dar el salto a primera o reserva, siempre pensando en alto» sostuvo.
Luciano rememoró que «en el primer tiempo llegué y jugué en el equipo de AFA, después me tocó bajar a liga, subir una vez más a AFA y terminé en liga nuevamente».
Al igual que a su amigo y compañero, a Luciano le costó la adaptación en el primer año pero el vivir con sus abuelos fue clave para superar las dificultades que se presentan y poder estar en comodidad y en familia. «Con Jonathan gracias Dios nos toca estar juntos, desde los 6 años jugamos juntos y poder seguir es algo muy lindo», afirmó también.
Entre los agradecimientos Luciano destacó a Pablo Tracamilla, Coordinador de Acción Social y al intendente Adrián Maderna que fueron quienes lo ayudaron con los pasajes, a la familia, a la familia Chingoleo y los abuelos que lo bancan en la persecución del sueño.