Argentina comenzó mejor, con la buena circulación del balón por parte de Messi, Rodrigo De Paul, Leandro Paredes y Lo Celso. Así el conjunto que dirige técnicamente Lionel Scaloni avisó con un tiro desde lejos de Agüero que se fue junto al palo derecho de Gabriel Arias.
Y en la siguiente jugada de riesgo se puso en ventaja tras una «avivada» de Lionel Messi, al lanzar rápido un tiro libre para Agüero, que eludió a Gabriel Arias y definió sin oposición.
Insistió el equipo de Lionel Scaloni, esta vez con un remate de Messi desde afuera que controló el arquero. Y de inmediato Dybala recibió una gran habilitación de Giovani Lo Celso, corrió por izquierda y marcó el segundo gol cuando le «picó» la pelota a Arias, que había ido a tapar abajo.
En el complemento Chile llegó al descuento luego de una falta de Lo Celso a Charles Aránguiz adentro del área y el penal cobrado por Díaz de Vivar con la ayuda del Var, que fue convertido por Vidal con un fuerte remate al medio.
No obstante Argentina siguió siendo mejor, con tenencia y distribución, aunque la salida de Dybala, en buen nivel, no pareció necesaria. Argentina estuvo más cerca del tercero que Chile del empate, como con aquel centro bajo de Angel Di María para Agüero, que quiso «picar» la pelota ante Arias y perdió frente al arquero, o un remate cruzado del propio «Kun» desviado.
Argentina no tomó desquite de las dos finales de Copa América perdidas ante Chile en 2015 y 2016 pero al menos se fue con una sonrisa y con una mejor imagen por lo realizado a partir de octavos de final.