El primer tiempo había sido un espanto. Transporte Wenú y Del Campo igualaban uno a uno en el encuentro final del torneo de futsal masculino de la divisional de Honor. Por penales ganó Wenú, pero eso nada tiene que ver con este escrito.

El partido se jugó el domingo por la noche en el Gimnasio Municipal ante una verdadera multitud. Y en el entretiempo ocurrió lo mejor. Lo más emotivo, lo que quedará grabado para siempre.  No estoy llorando, solo me entró una pestaña de Noah en el ojo.

Es cierto que Wenú es el campeón de la Divisional de Honor. Que las chicas de Fontana de Trevelin ganaron el torneo femenino y que Los Magios ganaron la final de la A y ascendieron a la máxima categoría. 

Pero todo esto, quedó eclipsado por lo que ocurrió en el entretiempo del partido.

Se sabía que la familia de Noah Ritson del Val tenían a cargo el buffet en esa jornada salonera del domingo. Se sabía también que un porcentaje de las entradas iba a ser entregada a la misma familia.

Pero lo del entretiempo fue emotivo, porque la gente (mucha gente no sabe quién es Noah) le regaló al pibe y a la familia un fuerte abrazo y el grito bien de cancha, deseando la pronta recuperación, de este jovencito de tan solo 13 años que la pelea en Buenos Aires.

Megan Ritson Rowlands, a quien entrevistamos muchas veces por ser la mejor jugadora de Hockey Pista, tenía en sus manos un celular. Ahí nos dimos cuenta que estaba en videollamada conectada con Noah, con su pequeño hermano. 

Lágrimas muchas, el deseo de pronto regreso a Esquel también fue mucho.

“Ahora estoy en un momento delicado, como de pocas palabras, porque la verdad que fueron muchas cosas para asimilar en tan poco tiempo” arrancó Megan en su entrevista con este medio.

“Pero, si te tengo que decir una palabra sobre Noah, Noah es milagro, es fortaleza, es valiente. Yo creo que con cada persona que hablo, le digo, “es un nene que vino a enseñarnos, a demostrarnos también que sí se puede”. Y bueno, es mi hermano.

Creo que cada uno haría lo que estamos haciendo nosotras por un familiar, pero la verdad que estamos todos tan conmovidos, emocionados y agradecidos

-Pero es curioso que mucha gente no sabe quién es Noah, que nunca lo ha visto.

-Es muy cierto, hay gente que no sabe ni quién es y está el día a día ahí, preguntando qué pasó, empatizando, acompañando, preguntando a ver cómo pueden acompañar, donar, hacer. 

La verdad que es increíble todo lo que está pasando y ni ellos saben (por Noah y los padres), no se imaginan ni un cuarto de toda esta movilización, más allá que lo del domingo fue increíble. 

Tenía un vídeo de frente, pero anoche te robé la transmisión, te robé esa parte donde ingresamos nosotras y cada vez que nos vemos caminando, lloro, lloro porque no puedo creer lo que está pasando.

- ¿Noah sabía de toda esta movida del gimnasio municipal? ¿Se lo han contado anteriormente? 

- Mirá, nosotras con las chicas nos enteramos el mismo domingo. Si bien lo del buffet sí, porque bueno, llegó mediante Marcelo (por Millamán) y Emanuel (por Brunt), quien es el entrenador de Noah, en el Club Malvinas, entonces sabíamos que teníamos ahí el espacio para poder hacer un bufet, para juntar plata, pero de todo esto, de la donación de las entradas y de la camiseta, fue en el momento. 

Estábamos ahí y Marcelo se acerca a hablar con Daniela (otra de las hermanas) y le comenta que en el entretiempo iban a hacer la entrega del sobre y de un presente para Noah. Nosotras imaginamos que iba a ser algo simple al costado de la cancha, ahí adentro del bufet, y cuando nos dice, vamos a pasar adelante, primero ya estábamos llorando de entrada, no queríamos llorar, ya faltaban creo que cinco segundos para que termine el primer tiempo y nosotras ya estábamos llorando. 

- ¿Y ahí surgió lo de la videollamada?

- Si, en ese momento que yo le digo a Dani, le llamo a Noah como para que él lo viva, ¿viste? Porque ni siquiera imaginamos que la gente iba a responder de esta manera, porque podía haber quedado en un aplauso y nada más, porque, como vos decís, hay gente que entiende, yo tenía muchas amigas que estaban sentadas ahí, que sabían de la situación. Hay gente que solamente sabe que es una movilización por un nene que está en Buenos Aires en un estado de salud delicado, nada más.

Así que la llamo a Marce (por Marcela, la mamá) para preguntarle, a ver qué estaba haciendo Noah, porque también esa es otra, lo de Noah es un día a día, es un momento a momento, ¿viste? Hay momentos que está bien, hay momentos que está mal, que es lógico a la situación, entonces tampoco invadimos mucho en eso de llamarlo, porque también es como se sienta en ese momento. Así que lo llamé y me dijo que sí, que él quería estar, y bueno, ustedes por ahí no pudieron apreciar mucho porque estaba en un celular, pero yo le mostraba, no sé si vos prestaste atención, que yo todo el tiempo lo miraba para ver cómo reaccionaba él. 

- Y vos mostrando la imagen de él a la tribuna. 

- Yo quería que él viera lo que estábamos viviendo nosotras ahí, ¿viste? Por eso yo después recorté el vídeo tuyo, porque yo también en mucho bullicio y con el celular capaz que no se escuchaba o no se apreciaba su canto o el aplauso, ¿viste? Y hoy pensó, tenemos un grupo de la familia donde estamos todos y puse el video, le digo, para que lo vean, porque no admiraba, pero claro, en el primer vídeo que yo subo, que lo filma una amiga que estaba en la tribuna, no se veía la gente, solamente nos veíamos nosotras.

Entonces hoy que te robé esa parte, le digo para que vean, o sea, las tribunas llenas, la gente parada. 

A mí lo que más me emocionó también, es que fue muy de cancha, a mí me encanta esa parte, Marcelo revoleando la camiseta, como que se olvidó todo el papel de presidente; la gente silbando, gritando, no, no puede ser que estemos viviendo esto. 

Y Noah que, con su cabecita vendada y la movía, porque también, si bien tiene 13 años, Noah es de muy pocas palabras, más allá de lo que él esté viviendo hoy, no es muy expresivo, como que le preguntás bien, mal y listo, es como, no preguntes más, pero siempre fue así, Noah no es de esta situación. Y movía la cabeza, yo la miraba, por eso me emocionaba también, porque dice mi papá que en un momento se le cayeron las lágrimas, y digo, guau, o sea, esto lo lograron ustedes, no nosotras, así que nada, la verdad que es muy emocionante todo lo que se está moviendo ahora.