El mediocampista francés Kingsley Coman, ex PSG, marcó el único gol del encuentro en un Parque de los Príncipes de París que retiró con abucheos generalizados a su equipo.
En el primer partido de Messi en Champions como campeón del mundo, PSG volvió a decepcionar y ni siquiera le bastó con el ingreso del delantero francés Kylian Mbappé en la segunda parte, en su regreso luego de una lesión muscular.
El francés Warren Zaire-Emery, con 16 años, jugó como titular en lugar de Mbappé y se convirtió en el jugador de menor edad en comenzar un partido de Champions.
Bayern Múnich fue superior en el primer tiempo. El equipo alemán acaparó la posesión de la pelota, mientras a PSG le costó hacer pie. El club parisino dependió de alguna genialidad de Messi o Neymar, porque su juego colectivo continúa ausente.
El crack rosarino buscó contacto con la pelota, se mostró lúcido en cada toque y en el último minuto dispuso de un tiro libre que pegó en la barrera.
El equipo alemán, campeón de Champions en seis ocasiones, convirtió a través de la pegada precisa de Coman, en complicidad con el arquero italiano Gianluigi Donnarumma, luego del centro exacto del canadiense Alphonso Davies.
Coman abrió el marcador en el Parque de los Príncipes, pero no gritó el gol por su pasado en el actual puntero de la Ligue 1.
Con la ventaja, Bayern Múnich se replegó y el local salió decidido en busca del empate, aunque lo mejor de su producción se vio en los últimos minutos.
A los 30, el arquero suizo Yann Sommer tuvo una doble tapada ante Mbappé y el brasileño Neymar.