Celeste Cid salió al cruce de quienes la criticaron por su cambio físico

Durante una entrevista radial en el programa "Vuelta y media" con la conducción de Sebastián Wainraich, por Urbana Play, la actriz Celeste Cid estuvo hablando de su participación en la película "Papá por 2" que realizó junto a Benjamín Vicuña y su relación amorosa con el actor y productor de "División Palermo" Santiago  Korovsky, los usuarios de redes y streaming comenzaron a mencionar lo cambiada que estaba la actriz. Se generó un revuelo en relación a "lo diferente que se notaba su rostro".

Es sabido que el uso de ácido hialurónico y botox está al alcance de la gente de una manera mucho más sencilla de lo que se piensa, cuando se dispone del dinero para realizarse algún retoque, que abundan en pómulos, labios, narices y ojos. Al parecer los seguidores de la actriz dieron por hecho que ella había pasado por el procedimiento. Fue tal el revuelo que la actriz decidió manifestarse en sus redes sociales y se tomó su tiempo para decir todo lo que pensaba. 

"A propósito de las muchas notas que tuve que hacer estos días, me encontré con tantos mensajes hermosos hacia mí y mi trabajo que no quería dejar de agradecer. 30 años, este año, me llenan de alegría saberlos ahí, que sigan recordando personajes, frases, historias, y saber que fui compañía en tantos momentos. Se siente muy linda esa cercanía... gracias por el amor”, comenzó escribiendo.

Luego apuntó directamente a las críticas: “Y leí otros comentarios, sobre todo aquellos que hablaban de cuestiones estéticas (‘ya no tiene la misma cara que a los 20′, ‘¿qué se hizo?’, ‘basta de cirugías’). No quise dejarlo pasar, porque creo que hay un tema de fondo que, como mujer, por supuesto me convoca y que observo en las redes en general. Pretender que tengamos la misma cara para siempre, además de ser cruel, es imposible. No tengo cirugías: soy una mujer de casi 42 años, y me parece justo que las mujeres podamos crecer en paz”.

La actriz sostuvo que sólo se trata del paso del tiempo y dijo que lo que sucedió con la gente en redes “no hace más que evidenciar el mandato que tenemos encima: ‘No se nos está permitido envejecer. Pues bien, no hay manera de frenar eso, abracemos el tiempo, incluso el que le dedicamos a escribir mensajes a otrxs, porque también es tiempo de nuestras propias vidas”.