Por REDACCIÓN SUPERDEPOR |
A poco más de dos semanas de comenzar el campeonato, Alberdi sufrió la inseguridad y se quedó sin los baños de sus humildes instalaciones en el barrio Planta de Gas.
No es la primera vez que les ocurre, de hecho han sufrido varios robos en el último tiempo, y esta vez complica y mucho su participación en el certamen de la Liga del Valle al no tener los baños en condiciones.
Y no solo se llevaron los elementos de los vestuarios, sino que también les robaron las pelotas que utilizan para entrenar. Para un club que hace todo a pulmón, esto fue un durísimo golpe.
UNA VEZ MAS
«Nos tocó una vez más, es la tercera o cuarta vez que nos pasa. Lo triste es que estamos por arrancar el torneo y es como volver a empezar todo de nuevo. Sabemos como estan las cosas, como cuestan, y al no tener ayuda del Estado ni de nadie cuesta un montón», explicó el titular de la institución, Walter Ramos, quien realizó la denuncia en la Policía.
A poco de empezar el certamen oficial, se encontraban trabajando en la mejora de las intalaciones y ocurrió este lamentable hecho.
«Estábamos tratando de arreglar los vestuarios de los árbitros, poniendo puertas en los baños y tratando de pintar pero llegamos al entrenamiento y nos encontramos con esto; es caro y se nos va a hacer difícil a dos semanas de empezar el torneo», remarcó Ramos.
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A poco más de dos semanas de comenzar el campeonato, Alberdi sufrió la inseguridad y se quedó sin los baños de sus humildes instalaciones en el barrio Planta de Gas.
No es la primera vez que les ocurre, de hecho han sufrido varios robos en el último tiempo, y esta vez complica y mucho su participación en el certamen de la Liga del Valle al no tener los baños en condiciones.
Y no solo se llevaron los elementos de los vestuarios, sino que también les robaron las pelotas que utilizan para entrenar. Para un club que hace todo a pulmón, esto fue un durísimo golpe.
UNA VEZ MAS
«Nos tocó una vez más, es la tercera o cuarta vez que nos pasa. Lo triste es que estamos por arrancar el torneo y es como volver a empezar todo de nuevo. Sabemos como estan las cosas, como cuestan, y al no tener ayuda del Estado ni de nadie cuesta un montón», explicó el titular de la institución, Walter Ramos, quien realizó la denuncia en la Policía.
A poco de empezar el certamen oficial, se encontraban trabajando en la mejora de las intalaciones y ocurrió este lamentable hecho.
«Estábamos tratando de arreglar los vestuarios de los árbitros, poniendo puertas en los baños y tratando de pintar pero llegamos al entrenamiento y nos encontramos con esto; es caro y se nos va a hacer difícil a dos semanas de empezar el torneo», remarcó Ramos.