“El jiu jitsu brasileño es un deporte que está cada vez más de moda en todo el mundo. Es un arte marcial que tiene múltiples ventajas, sobre todo, para ponerse en forma. Y es que con su práctica se realiza mucho ejercicio físico, moviendo prácticamente todos los músculos del cuerpo. Pero no son sus únicas bondades ya que también es de gran ayuda para equilibrar cuerpo y mente”, explicó el profesor Hernández a EL CHUBUT.
“La mecánica básica consiste en conseguir llevar al contrincante al suelo con el objetivo de iniciar la lucha utilizando técnicas como inmovilizaciones, luxaciones o estrangulamientos. Por lo tanto a la hora de empezar el combate en el suelo, los dos oponentes están en las mismas condiciones de altura y los ataques serán más igualados.
Este arte marcial brasileño se hizo famoso mundialmente en los años 90 gracias a Royce Gracie, perteneciente a la segunda generación de la familia creadora de este tipo de lucha. En la actualidad se sigue expandiendo como práctica habitual en los gimnasios.
En la ciudad, uno de los lugares donde se puede aprender es en la academia Madryn Jiujitsu, ubicada en Alem 361 (pasillo al fondo).
Los graduados: Germán Daponte y Sebastián Torres (cinturón marrón), Julio Bazán, Juan Carlos Pérez y Carlos Maturané (cinturón violeta), Elias Larini, Ezequiel Olivares, Cristian Román, Gustavo González, Miguel Angel Vega y Daniel Rodríguez (cinturón azul) y Martín y Luciano González (cinturón gris).