«En el año de su cumpleaños número cien los responsables del departamento de fútbol femenino del club trelewense lamentan informar que ya no volverán a los entrenamientos por lo que resta del año», expresó el comunicado. A su vez se refirió a las causas al señalar que «los estragos causados por la pandemia provocada por el virus Covid-19 han logrado que este año 2020 se recuerde con mucha pena por los simpatizantes, hinchas, empleados, dirigentes, cuerpos técnicos, jugadores de todas las disciplinas, que verán frustrados los festejos por el aniversario de su querido club, que nada más ni nada menos llega a su centenario».
Además expresa que «si bien transcurren recién los primeros días del mes de septiembre y al haber confirmado la liga de fútbol local que hasta el mes de octubre no se volverán a reunir, es simple pensar que hasta el mes de noviembre no podría haber competencia oficial para las distintas divisiones del torneo doméstico. Y es lógico reflexionar que en un mes y medio es imposible organizar algún tipo de competencia, porque sabido es que competir en los meses de verano es algo que los dirigentes no van a evaluar nunca».
En otro párrafo destacó: «El gran ‘semillero del valle’ del fútbol femenino como lo es la academia de Trelew, había comenzado sus entrenamientos en el mes de febrero en su sede social de la calle 25 de Mayo y Ramón y Cajal con todas sus categorías. Con sus dos planteles de primera división completos y haciendo una gran pretemporada. Al momento de desatarse la lamentable enfermedad, la próxima institución centenaria contaba con más de cien mujeres practicando fútbol en las instalaciones de La Ochava, complejo de canchas que le alquila sus instalaciones al fútbol femenino racinguista desde hace cinco años, en los meses de marzo a noviembre». A su vez se lamentó al decir «quedaron truncos los sueños de muchas jugadoras que se imaginaban volver a representar al club en el torneo local, de repetir en ponerse la camiseta de la selección de la liga del valle y competir en el torneo nacional de selecciones que cada año se disputa. Deseaban calzarse nuevamente la indumentaria de Chubut Deportes y viajar al país vecino de Chile a disputar los Juegos de La Araucanía. Añoraban participar por tercera vez de la liga de Desarrollo Evolución organizada por la Conmebol en las categorías sub 14 y sub 16. Ansiaban representar a la institución en los legendarios Juegos Evita como estaban acostumbradas durante muchos años.
Pero quizás el sueño más esperado era desfilar por las calles de nuestra ciudad luciendo con orgullo los colores rojo y blanco, festejando los cien años de una institución muy grande y querida de la Patagonia Argentina», finalizó.