Boca Juniors avanzó en la noche del sábado a las semifinales de la Copa Libertadores femenina que se disputa en Paraguay. Luego de empatar sin goles al cabo de los 90 minutos con el Santos brasileño, el conjunto xeneize se impuso en los penales por 4-2 y se metió entre los cuatro mejores del certamen continental. El presidente de la entidad de la Ribera, Juan Román Riquelme, observó el desempeño de las Gladiadoras.
El próximo rival del multicampeón argentino será el Corinthians, de Brasil, que a primera hora superó por 2-0 a Olimpia, de Paraguay.
El conjunto auriazul pudo y debió extraer la diferencia en el período regular. De hecho, su juvenil delantera, Kishi Núñez, dispuso de -al menos- cinco ocasiones claras para marcar y no pudo convertir ninguna. La última, ya en tiempo de descuento, supuso un remate desde fuera del área que pegó en el travesaño y salió.
Boca planteó un encuentro parejo cortándole los circuitos de juego a un Santos, que no pudo progresar en el campo, un poco por la férrea presión del adversario y otro tanto porque el barro que se acumuló en algunos sectores del campo de juego (por las lluvias que cayeron en días anteriores) del Centro Nacional de Alto Rendimiento de Ypané conspiraron contra su iniciativa.
En ese contexto, entonces, las Gladiadoras buscaron salir rápido de contra para intentar lastimar a un equipo brasileño que adelantaba sus defensoras y dejaba espacios. En los primeros 45m., Núñez tuvo dos situaciones concretas y la arquera del Santos, Karen Hipolito, resolvió con criterio para ahuyentar el peligro.
En la segunda parte, el ritmo decreció y el juego se hizo más trabado, más impreciso. La administración del balón correspondió mayoritariamente al conjunto brasileño, mientras que Boca supo utilizarla mejor y logró complicar con las diagonales de la formoseña Estefanía Palomar.
Pero el marcador no se alteró y la definición se produjo a través de la vía de los tiros desde el punto penal. Allí, la bonaerense Laurina Oliveros le detuvo un remate clave a Ana Carla y, posteriormente, la marcadora de punta, Julieta Cruz, de muy buen rendimiento, le dio el pasaporte al elenco xeneize, con un disparo fuerte.