Boca comenzó la jornada con la mala noticia de que el mediocampista Guillermo "Pol" Fernández, padece una lesión que lo hará perderse el Superclásico ante River el próximo domingo 25 de febrero.

El futbolista había sufrido una molestia en el partido frente a Central Córdoba de Santiago del Estero, tras lo cual se sometió a estudios y los mismos confirmaron una lesión.

Aunque aún resta conocer el parte médico oficial, se filtró que la dolencia sería en uno de sus tobillos y que le demandaría cuatro semanas de recuperación, por lo que quedaría fuera del encuentro ante el conjunto de Núñez.

El futbolista con pasado en Racing y Godoy Cruz, salió reemplazado a los 32 minutos del segundo tiempo del juego ante Central Córdoba (SdE) por sufrir un dolor luego de la caída de un rival en esa zona. Esto lo llevó también a perderse el último entrenamiento.

El presente de “Pol” Fernández está lejos de ser el soñado en Boca, ya que, junto con Jorman Campuzano y Frank Fabra, fue uno de los apuntados por la hinchada en el regreso a la localía en 2024 tras perder la final de la Copa Libertadores 2023.

Recibió silbidos y reprobaciones tanto en el Nuevo Gasómetro, donde Boca jugó de local en la segunda fecha ante Sarmiento de Junín, como en La Bombonera. Además, dejó de ser el capitán del equipo y ahora quien porta la cinta hasta que se recupere Marcos Rojo es el arquero Sergio Romero.

Pese a la reprobación por parte del público, el mediocampista es una de las fijas en el equipo de Diego Martínez y también cuenta con el respaldo incondicional del presidente del club, Juan Román Riquelme.

"Sin dudas, el mejor jugador que vamos teniendo en este torneo es ‘Pol’ Fernández, hace todos los partidos de la mejor manera. Fue el culpable de que nos haya hecho llegar a la final de la Copa Libertadores, porque en los dos partidos con Palmeiras fue el mejor jugador. Es real que hay jugadores que con poco tienen un reconocimiento muy grande y otros, no sabemos por qué, les cuesta un poquito más", declaró luego de la victoria ante el equipo santiagueño en una entrevista con TNT Sports.

“Creo que lo que pasa es que la gente cree que es demasiado bueno y le exige un poco más. Pero hace todo tan fácil que, al que le gusta al fútbol, el que entiende el fútbol, mira las cosas que hace, ocupa los lugares que tiene que ocupar, hace los movimientos que tiene que hacer”, destacó,

"A veces está en situaciones en las que él no tiene que estar por defender a un compañero, porque el compañero está mal ubicado y fuera de posición. Cuando hay tanta gente que es fanática y quiere que el equipo gane, muchas veces pasa que a muchos jugadores se le agarra mucho cariño y a otros por ahí no tanto", sentenció.