Rosario Central vivía una fiesta este sábado por la tarde en el Gigante de Arroyito: volvió a jugar Ángel Di María, que anotó un gol, también lo hizo Alejo Véliz tras su paso por Europa, pero Godoy Cruz se lo empató sobre el final y el 1-1 final fue un baldazo de agua fría en su estreno en el Torneo Clausura. 

Le costó mucho al equipo de Ariel Holan generar peligro. Lo más claro en ataque fue a través de pelotas paradas, por la buena presencia aérea que tiene el Canalla con sus buenos cabeceadores. A Di María también le costó desequilibrar a la defensa mendocina, y le hicieron sentir el rigor constantemente con un juego brusco, al igual que a Véliz, una víctima permanente de las duras entradas de Federico Rasmussen y Mateo Mendoza, sobre todo.

Por el contrario, el Tomba se sintió cómodo y contraatacó cada vez que pudo ante algún error en las salidas locales. El entrenador Esteban Solari no apostó a meterse atrás, jugó de igual a igual, tuvo un cabezazo en el travesaño y, aunque le cedió la pelota al rival, supo controlarlo y no sufrió más de la cuenta durante gran parte del primer tiempo. Sobre el final, el elenco rosarino empujó un poco más, pero sin éxito.

En el complemento, las acciones individuales de Fideo comenzaron a tomar otro peso. Bien abierto sobre la derecha, buscó siempre enganchar hacia el medio, como acostumbra a hacer hace tantos años. Su verticalidad le dio otro tipo de calidad a los ataques canallas, pero no alcanzaron para que el equipo pudiera quebrar el marcador y ponerse en ventaja, aunque tuvo dos tiros en el travesaño en la misma jugada tras un tiro de esquina. 

No faltaba mucho para el final del partido cuando el árbitro Pablo Dóvalo cobró penal para los locales por un muy leve agarrón del ingresado Daniel Barrea sobre Véliz. Por supuesto, Di María se hizo cargo y lo ejecutó con mucha clase para luego festejar revoleando su camiseta y besando el escudo. Su último festejo vistiendo los colores amarillo y azul había sido el 16 de julio de 2007, en la derrota del Canalla sobre Colón de Santa Fe por 3-1: él había marcado el empate parcial.

En el epílogo de la tarde rosarina, el propio Angelito salió por un fuerte pisotón de Vicente Poggi, quien fue amonestado por la acción, y minutos después vio la tarjeta roja Barrea, precisamente el cometedor del penal que abrió el encuentro. Dóvalo lo expulsó por una enérgica protesta de una supuesta falta dentro del área de Jorge Broun.

Pero le faltaba algo a la fiesta que vivió el Gigante: el propio Poggi anticipó a pura garra a la altura del punto penal y dejó sin reacción suficiente a Fatura, que no pudo evitar el empate agónico.

La siguiente parada del Central de Holan será en la Fortaleza ante Lanús, el sábado que viene a las 16.30, al tiempo que a Godoy Cruz le tocará recibir a Sarmiento el mismo día pero un rato después, a las 18.45, en su reinaugurado estadio, el Feliciano Gambarte.